jueves, 22 de noviembre de 2012

Diario de ...





"Pasa, no tengas miedo. Perdí la voz hace mucho, ya no pueden herirte mis palabras."

 Uno cree que las sombras sin luz desaparecen; mentira. Las sombras son permanentes, como el lápiz que no se borra, como el hielo que no se derrite, como el papel que no se rompe. En algún momento me di cuenta que las cosas no eran tal y como las había aprendido. Fue mi renacimiento, mi desaprender, el despertar de mi (no) consciencia. Una vida no vivida, fantasmal e incoherente pero más real que la propia realidad. Percibir lo apercibido, lo inexistente y lo negado. Caminar sin prisas. Arrastrar las cadenas sin peso y los recuerdos sin dolor. Advertir el no olor de las cosas, la no silueta de los objetos; El Difuminado, esa sería la palabra correcta. Toda la gama de la inexactitud. Trasmutar lo que hasta el momento se suponía cierto. Un peregrino “Ligero de equipaje”, como diría el poeta. Deambular por el camino andado sin hacer preguntas; ya se conocen las respuestas. Sencillamente, vagar por la eternidad hasta el fin.

Texto extraído del diario de un fantasma (El no muerto).

 
                     



jueves, 8 de noviembre de 2012

Sino


Te partes en dos, para vivir el tres
Aquel que nunca cuenta

El que se esconde detrás de las puertas

                                  sigilosamente silencioso

El que ni se percibe ni se siente
 
Al que por miedo 
                                   nadie nombra
                                   
El único realmente cierto

Final del camino 
                                   Hades
¿Destino lo llamas?
                                    Quien sabe.

miércoles, 17 de octubre de 2012

La búsqueda




Quería realizar un acto de introspección y me encontré deambulando dentro de mi propio cuerpo. Yo, como gusano diminuto viajando a través de mi sangre. La verdad me sentí muy bien, era como haber encontrado al fin mi hábitat natural.
Con una temperatura notablemente agradable, carente de frío o calor, me dejé llevar sin más por la experiencia del momento. Me costó acomodar la vista al principio. El rojo de la sangre predominaba sobre los demás tonos pero no era molesto y andar por los tejidos blandos se hacía poco cansado, era como dar saltos sobre una cama elástica. En definitiva, mi introspección estaba siendo de lo más entretenida.
Andaba yo en mis cavilaciones, cuando me vi rodeada por infinitos destellos luminosos cosquilleándome con su corriente. Tomé consciencia de inmediato. Estaba dentro de mi cerebro: el Dios omnipotente de todas mis ideas, mis emociones, mis recuerdos, mis verdades y mis mentiras. Pronto tuve un deseo irrefrenable de encontrar algo ¿Cuál era ese neurotransmisor relacionado con la sensación de felicidad ? Ah sí, ya lo veo. Un gran cartel con luces de neón llevaba escrito su nombre: DOPAMINA. Me lancé con ansia ingiriendo toda la cantidad que mi gusanil cuerpo me permitió, hasta que la sensación de placer me sació por completo. Ese, era el único Dios que necesitaba.
Segundos después una voz rompió mi estado de éxtasis.
- Sra Lopez, sus pastillas.
Abrí mis ojos, y vi a esa mujer que se me hacía extrañamente familiar sonriéndome. Miré la bata blanca y pude leer con claridad :
Enfermera Hildegarda González. Hospital Psiquiátrico Nuestra señora del Rosario.

viernes, 5 de octubre de 2012

Zurich





Sentado en la terraza de mi bar preferido, me propuse pasar el rato haciendo lo que más me gustaba, observar a la gente. Imaginar e intuir, saber sin que te sepan, nada más emocionante para agudizar la mente de un cazador nato como yo.
Son incontables los placeres que me provocan todas esas mujeres floreciendo al paso de la primavera. Ninguna tiene desperdicio, soy de los que siempre han creído que en cada curva femenina se esconde algo bello, todas esas féminas son poseedoras de cosas apetecibles

-¿Desea tomar algo? Un poco pronto para lo etílico, pensé. Café solo, por favor.

Así transcurría tranquila la mañana cuando algo me incomodó e hizo que volviera la cabeza. No fue un acto reflejo, me sentía observado. Y allí estaba ella. La reconocí al instante. Habían pasado más de veinte años pero a mí, apenas me parecieron unos segundos. Recordé su silueta dirigiéndose hacia la puerta de mi apartamento de entonces, y la sensación amarga del que sabe que ya nunca más volverá a ser dueño de esa mujer. Me sonrió; había tristeza en su mirada; se veía cansada y sin embargo no había perdido ni un ápice de su frescura." Donde pone el ojo pone la bala", recordé esa frase y sonreí. Hice el ademán de levantarme para darle dos besos pero ella movió la cabeza. Se puso en pie y se perdió caminando entre la gente.
Cuando quise seguir sus pasos, quedé envuelto dentro de una espesa neblina. Me faltaba el aire, no podía respirar. Ella había desaparecido. En realidad todo había desaparecido. Intenté gritar y no pude. Me invadió el pánico y... desperté empapado de sudor en mi cama. Un sueño, todo había sido un sueño.
Mi mujer llamó a la puerta.

-   Acaba de llegar una carta para ti de una tal " pistolita ".

- " Donde pone el ojo pone la bala”. Solté una enorme carcajada. Ese día supe que volvería a verla.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Cotidianidad



                                                    Me senté
                         estaba cansado, agotado, exhausto y herido

                                                     Te sentaste
                         estabas cansado, agotado, exhausto y herido

                                                      Se sentó
                         estaba cansado, agotado, exhausto y herido

                                                     Nos sentamos
                         estábamos cansados, agotados, exhaustos y heridos

                                                     Os sentasteis
                         estabais cansados, agotados, exhaustos y heridos

                                                     Se sentaron
                         estaban cansados, agotados, exhaustos y heridos

                                      Descansamos juntos y
                                                                             Vuelta a empezar

sábado, 25 de agosto de 2012

Sin un adiós.




Una gran verdad, es que nuestro tiempo no es indefinido ni infinito.

 

Dejó que la corriente de aire se lo llevara suavemente, con armonía, bailando un pequeño vals dentro de la "Nada”. Con ausencia total de pesar o de angustia. Un simple dejarse ir. No importaba donde. Sin metas ni realidades más allá del propio momento. Un solo instante que resumía una vida. Quizás dos, tres, cuatro. ¿Quién sabe? qué más da. Dejarse llevar, eso era todo.
Ir menguando despacio. Primero, casi imperceptiblemente. Después, aceleradamente hasta dejar de ser.
Como todas las mañanas, ella entró en la habitación para darle el beso de buenos días. Ese día
Sin embargo, sintió la gélida piel sobre sus labios. Entendió al instante que el ya no estaba. No derramó una sola lágrima. Lo miró tiernamente y observó la dulce sonrisa dibujada en su rostro.

- Espérame. No tardo. Pronto me reuniré contigo - Le susurró tiernamente al oído.

Fueron las últimas palabras que pronunció




                                                       






viernes, 10 de agosto de 2012

El silencio de las rosas blancas





Los dos entraron por puertas distintas, tomaron su silla y se sentaron de lado, ni de frente ni de espaladas, de lado, justo para que sus brazos sintieran el calor de sus cuerpos y sus manos se acariciaran. Estaban solos en medio de esa inmensa sala ovalada. Delante, un gran ventanal que dejaba entrar la luz diáfana del día .Nada más, ellos y dos sillas era todo lo que había en aquel lugar.
Impregnaba el ambiente un gran silencio, ese que se vuelve denso y que muchas veces significa más que cualquier palabra. Sus ropas de blanco inmaculado empezaron a difuminarse hasta tornarse casi invisibles, dejando vislumbrar los cuerpos ya vetustos de los amantes mientras una suave fragancia de azahar inundaba la estancia. Ellos no habían cruzado mirada alguna, sólo necesitaban sentirse uno junto al otro para estar en paz; se habían reconocido infinidad de veces antaño, ahora el solo roce de sus manos les valía para saber que formaban su dos, su maravilloso y singular dos.
Una leve brisa abrió la ventana de par en par dejando entrar un sonido musical apenas perceptible al oído sí no hubiera sido por el silencio que reinaba en la sala. Lo reconocieron al instante, era el concierto n. 5 para piano y orquesta de Beethoven. Sus ropas habían desaparecido por completo. Desnudos y con la música en aumento dejaron las sillas, se miraron a los ojos y se besaron, se besaron con una pasión tierna y dulce, sin prisas ni atropellos, se abrazaron y sintieron como se fundían el uno en el otro, muy despacio, muy despacio, muy despacio...

-No corras tan deprisa que no te alcanzo-Le dijo Violeta a su hija mientras la seguía campo a través. Pronto observaron frente a ellas lo que parecía una pequeña casa ovalada con una inmenso ventanal abierto de par en par .La niña no lo pensó dos veces y entró. Salió con dos hermosas rosas blancas en la mano.

-Son ellos mamá. Toma, para ti.

viernes, 27 de julio de 2012

Simbiosis



Tenía tanto por decir que nunca supo cómo empezar. En realidad nunca supo cómo empezar nada, era curioso. En el fondo su mal sabida facilidad fue la misma que le impidió desarrollar cosa alguna. Jamás le salieron las cuentas. Jamás de los jamases, ya podía intentarlo una y otra vez, que después de un buen principio, nada; era como si un muro gigantesco empezara a formarse desde el inicio. Daba igual lo que fuera, algo cualquiera incluso intrascendente, acababa siendo un eterno principio, eso era todo lo que había conseguido hacer: un eterno y gran principio.

Tenía tan poco que decir que nunca supo cómo desarrollar algo que no fuera el puro final. Todo el mundo le decía" ¿No ves que para llegar al final has tenido que empezar por el principio?" Y lo que nadie entendía, era que su comienzo, desarrollo y desenlace eran tan rápidos que lo único que podía retener era eso, un simple final.

Un día principio y final se cruzaron, se miraron, se reconocieron al instante y desaparecieron por la calle del infinito sin número.

 

martes, 17 de julio de 2012

Quizas, tal vez,seguro


Perderse en el sendero de los innombrables

quizás

En la ruta de los desaparecidos

tal vez

Formar parte de los no reconocidos

seguro

Mientras

solo queda andar por el camino de la sin razón

El que se mueve más allá de la realidad existente

El único capaz de llevarme

al paraíso de la utopía sin fin

Mi paraíso.

lunes, 25 de junio de 2012

La espada y el cuento.







Lo único que había deseado en la vida era poder ver el cielo azul y claro.

Sin esperar sorpresa alguna levantó la mirada y allí estaba hermosa y reluciente su magnífica espada de Damocles, justo sobre su cabeza, donde sus ojos pudieran verla bien. Fuera a donde fuera o hiciera lo que hiciera ella siempre estaba presente, siempre presente; ni en el más profundo de sus sueños desaparecía: expectante, vigilante, colgada de su fino hilo esperando el momento de soltarse al fin y caer sobre él para dar sentido a su existencia.
Lo llamaban loco. ¿Acaso alguien podía vivir con ese peso encima sin estar loco? ¡Que sabía nadie! Su Vía crucis era suyo y el camino lento y tortuoso hasta el Gólgota también. De nada valía ignorar la realidad, solo su locura le daba pequeñas treguas y le permitía respirar con facilidad. Había intentando en infinidad de ocasiones poner fin a este sin sentido llamado vida, pero la cobardía se lo impedía.
Un día al levantarse notó algo distinto, se sentía muy bien, quizás como nunca se había sentido. Miró hacia arriba y no vio la espada. No había techo en la habitación solo un inmenso y maravilloso cielo azul; sin apenas darse cuenta empezó a subir y subir y subir hasta que volando desapareció. Digo desapareció porque literalmente fue así: nada quedó de él, ni su recuerdo. Quizás la espada era lo único que lo hacía visible al mundo y lo mantenía vivo.

Una mañana me llegó una carta sin remitente, al abrir el sobre reconocí de inmediato su letra, había escrito dos frases.

Los seres agónicos como yo desperdiciamos la vida inmersos en nuestras propias fobias. Sigo con mi espada.

Nunca más volví a tener noticias de él.



miércoles, 23 de mayo de 2012

Infinito puerto infinito

                             


                     En  el puerto  infinito amarró  su bote  sin preguntas  ni porqués
                           En el puerto infinito alcanzó sus sueños sin estar dormido

                                    En el puerto infinito halló su alma sin dolor

                                              En el puerto infinito descansó
                                                      En el puerto infinito

                                                           Infinito puerto
                                                                Renació

                                                           Puerto infinito
                                                      En el infinito puerto

                                                El puerto del descanso infinito
                                      En donde halló sin dolor su alma, puerto infinito

                          El  Infinito puerto donde sin estar dormido alcanzó sus sueños
                    Allí  donde su bote amarro sin porqués ni preguntas, en el infinito puerto.

                                   

martes, 8 de mayo de 2012

El Aprendizdetodoymaestrodenada




 

El Aprendizdetodoymaestrodenada despertó un día cualquiera, de un mes cualquiera de un año cualquiera, en un lugar cualquiera de este planeta llamado Tierra. Como todas las mañanas, esbozó una gran sonrisa, se desperezó y soltó un enorme y sonoro bostezo.

-Buenos nuevos días, se dijo para sí.

Como siempre, el Aprendizdetodoymaestrodenada preparó su pantagruélico desayuno para empezar el día con ímpetu. Terminado el banquete se dirigió hacia su despacho donde atendía diariamente.
Un hombre con Camisa negra, pantalón negro, corbata negra y americana negra esperaba tras la puerta .Estaba ya muy acostumbrado a verlos con ese atuendo.

-Buenos días, ¿el Aprendizdetodoymaestrodenada, supongo?…

-Efectivamente soy yo, dijo sonriendo cortesmente. ¿En qué puedo ayudarle?

- Tengo una pregunta para usted. Verá, yo soy un maestro docto en la materia que he estudiado.
 
Me he pasado la vida entre libros, muchos dicen que soy un erudito, nadie sabe más que yo acerca de la misma. Después de pasar toda mi vida dedicado a su conocimento absoluto, ahora me siento vacío. En realidad debo reconocer que hace tiempo que dejó de interesarme la materia en cuestión, incluso confieso haberla aborrecido.
Pensé que quizás siendo usted el Aprendizdetodoymaestrodenada, podría ayudarme a encontrar algo que pudiera interesarme, algo a lo que entregarme y sentir de nuevo un poco de apego a la vida.
El Aprendizdetodoymestrodenada lo miró pausada y detenidamente. Observó su rostro envejecido, sus ojos hundidos y la mirada perdida en un punto sin retorno.

-Podría darle mucho pero usted no recibiría nada. No volverá a apasionarse de la misma forma.

Nada le hará sentir igual de vivo. Su mundo se cerró. Podía haber aprendido mucho pero decidió ser maestro de poco, en el fondo ni siquiera fue su pasión, solo un gran lastre que arrastró año tras año, eso es lo más triste. Ahora cuando salga de mi despacho, la bella muerte le estará esperando, eso ya lo sabía usted, yo no puedo cambiar lo inevitable. Entréguese a ella con vehemencia, tal y como se entrego al estudio de su materia, quizás así, pueda terminar su vida sin sensación de hastío.
El hombre bajo la mirada y se dirigió hacia la puerta. La bella muerte lo estaba esperando. El Aprendizdetodoymaestrodenada suspiro profundamente y se preparó para recibir al siguiente desahuciado.

lunes, 16 de abril de 2012

Pérdida


Despertó con un  leve dolor de cabeza, después de tantos años conviviendo con el alcohol apenas tenía resacas. Estaba de mal humor, no había pasado una buena noche y había  regresado solo a casa. Antes amaba su retiro, pero con el paso de los años y la vejez a la vuelta de la esquina, había momentos donde añoraba profundamente el tacto de una piel cálida y dulce a su lado. En el fondo y por muy anacoreta que se sintiera, a nadie le amarga un dulce, además su presa era realmente apetecible, pero se le escapó.
- Pobre viejo estúpido, ya estás perdiendo facultades .Pensó.
Se levantó de la cama con dificultad, últimamente perecía que sus rodillas andaban peor, tenía las dos operadas y obviamente los años y los abusos no les habían hecho ningún bien.
Decía la canción “si el pasado no perdona, hoy cúrate llorando” ¿llorando?, de su boca salió una risa sarcástica y llena de amargura.
- Estoy tan seco, que ni lágrimas para llorar tengo. Entonces  miro hacia la pared y allí estaba, su ángel, la que en un tiempo fuera su musa,  su amante, su mujer, su mundo, a la que adoro por encima de todas, la que apaciguó su atormentado corazón con ternura, su única…….. Agachó la cabeza, sentía tristeza y vergüenza, lo había tenido todo y lo había perdido. Ella lo  abandono cansada de sus desprecios, sus excesos, su desdén y su enfermizo egocentrismo.
Con desgana se dirigió hacia la mesa de trabajo, debía terminar su artículo y entregarlo hoy sin falta.
-¿En qué te has convertido? Pensó.
Llevaba dos semanas  y no había podido escribir nada. Volvió a mirar hacia la pared. Creyó  olerla, creyó sentirla, creyó poseerla de nuevo. Tomo su pluma y al fin escribió.
 LOCURA Y MUERTE DEL QUE QUISO SER Y NUNCA FUE.
 Cerró sus ojos y se sumergió en el sueño de Hades.

martes, 10 de abril de 2012

No existe



No existe noche que acalle mis espantos
ni amanecer que apacigüe mi alma

ni sueño que me confunda

solo tu piel junto a la mía

advierte la realidad  nítida.




No existe virtud que me concierne
ni belleza que me cubra

ni carácter que me defina
solo tu mente en la mía

convierte la locura en sentido.



Amar, amado, amor
deseado, impuro, altivo

dependiente, anhelado, obediente

Si y no,

no existe contradicción alguna

Es.





martes, 28 de febrero de 2012

Poema al revés del Poema


Revés al Poema



El principio

caída al vacio

precipitarse hacia el acantilado

olas chocando contra el cuerpo mutilado

rompiéndose en mil pedazos

                                        el YO de antaño

Renaciendo en el agua

de sexo y de vida

de pasión desenfrenada

sentimientos encontrados

                                      con tragedias abortadas antes de nacer



A través del camino

luces y sombras diluyéndose

el ambos consecuente

acabado de surgir

el que debería culminar la creación

                                       hasta llevarlos a su fin.



Poema al revés



Hasta llevarlos a su fin

el que debería culminar la creación

acabado de surgir

el ambos consecuente

luces y sombras diluyéndose

                                         a través del camino



Con tragedias abortadas antes de nacer

sentimientos encontrados

de pasión desenfrenada

de sexo y vida

                                          renaciendo en el agua



El Yo de antaño

rompiéndose en mil pedazos

olas chocando contra el cuerpo mutilado

precipitándose contra el acantilado

caída al vacio

                                          El principio.

jueves, 26 de enero de 2012

Puros garabatos


Puros garabatos

Y una mente en blanco

Del lenguaje perecedero

Del hastió que arrastra el cuerpo

                                             Al miedo de la muerte presente.


El  Saber que demasiado ocupa

El sentir que lo ahoga

El amor que no cobija

Sabandijas acechando detrás de las puertas

Pesadillas del niño que sufre

                                      El que jamás creció

Del adulto que nunca existirá

Atrapado en el sueño

                            Sin posibilidad de escapar

                                                               Del dédalo que antaño le cobijó

El que al fin

                Pareció colmar sus expectativas

Al que convirtió

                En su único mundo

Y  acabó tornándose  

                Su maldita prisión.

sábado, 21 de enero de 2012

Dando vueltas y vueltas alrededor del mismo círculo


Dando vueltas y vueltas alrededor del mismo circulo.

 ¡Hacia tanto tiempo que andaba recorriendo ese camino ! Tenía la firme convicción que ese era SU camino.
Una vuelta, otra vuelta, ahora corro, me detengo, cambio el sentido, vuelvo a parar, desando lo andado, camino hacia atrás, un trocito a la derecha, media vuelta, otro a la izquierda, y así, otra  y otra y otra y …, en fin, una vida tranquila y cómoda. Ni sabía, ni quería, ni deseaba nada más.
En realidad, su círculo  era un círculo bien delimitado, con un trazo firme que le permitía seguirlo sin problemas. Recuerda que al principio sufrió un poco los mareos del andar dando vueltas, pero a fuerza de costumbre dejó de sentirlos, es más, no tenía sensación alguna de dar giros, más bien la de caminar por una senda recta que le daba cierta estabilidad.
Un día de sol radiante, después de haber dormido un rato y justo cuando se proponía empezar de nuevo su trayecto diario, observó absorto como un intruso se había colado en el. ¿Cómo? Oiga, le habló al intruso, usted me disculpará, creo que quizás no  haya advertido que está  invadiendo mi espacio, este es MI circulo, si tiene la bondad de retirarse se lo agradeceré profundamente, le dijo con la mayor corrección del mundo. En el fondo estaba aterrado y pensó que no sería bueno entrar a malas, quien sabe cómo podía reaccionar el tipo en cuestión. El intruso siguió frente a el, mirándole fijamente a los ojos, impertérrito y sin soltar palabra alguna. ¿Qué tal el descarado? ni contesta siquiera. Óigame usted, intento decirle o más bien explicarle de buenas maneras dadas las incómodas circunstancias en las que nos hallamos, que está ocupando un espacio que no le pertenece ¿entiende eso ? ¿ puede distinguir entre MI espacio y SU espacio? el mío y el suyo  ¿entiende estos simples conceptos?. El intruso seguía allí, en silencio, un silencio que ya se le antojaba más que incómodo. Mire, lo intentaré por última vez, si no sale de MI circulo, me veré obligado a tomar medidas que igual no le agradarán mucho. Nada, sin respuesta ninguna, el tipo seguía frente a el sin inmutarse, con su mirada fija en sus ojos y sin soltar palabra. Está bien, yo lo he intentado a las buenas, pero visto lo visto tendré que tomar otro tipo de acciones. Vaya por delante que estaba usted más que advertido. Entonces, se abalanzó contra el susodicho empujándole tan fuerte, que los dos, cayeron al suelo de golpe saliendose por completo de la circunferencia. Ja ¿que se había creído? ¿Acaso me supuso incapaz de defender mi espacio? ¿Tan cobarde, pues?.
Entonces el intruso sonrió, sonrió con una sonrisa un tanto infantil, casi maliciosa diría yo. Se levantó del suelo, le tendió la mano y le dijo, ¿ves? fin del trayecto, ya no hay círculo, eres libre.

domingo, 15 de enero de 2012

Océano




Océano

Distancia

partículas disueltas

¿Quien dijo que fuera fácil?

Ilusos los que creyeron

cobardes los que negaron

bastardos los que impidieron

muertos los que no amaron

necios los que obstruyeron

cretinos los que por locos nos tomaron

Ven a mí

ahógame

beberé tu salada agua de un solo sorbo

engulliré cada uno de tus peces

de tus algas

de los navíos muertos en tu fondo

Comeré tus lodos revueltos

envenéname

que más da

¿por qué?

porque luego desaparecerás

te habré vencido

                            y

                               al fin

                                        habré alcanzado mi Ítaca.






sábado, 7 de enero de 2012

Un lápiz

Un lápiz
Dibujo una línea recta 
marco dos puntos
uno al principio
                           otro final
Un lápiz
dibujo una línea recta
marco tres puntos
uno al principio
                            uno a la mitad 
                                                      otro final
Un lápiz
Dibujo una línea recta
marco cuatro puntos
uno antes del principio
                                        al principio
                                                             mitad
                                                                        y  final
Un lápiz
Dibujo una línea recta
marco cinco puntos
uno antes del principio
                                         al principio
                                                              mitad
                                                                          final
                                                                                    y  después del final
Un lápiz
dibujo una línea recta
escribo seis palabras
                                               así es mi amor por ti

martes, 3 de enero de 2012

Erase una vez unos hombres a una sombra pegados

Me sorprendió darme cuenta del tiempo que yo había pasado entre ellos sin percibirlos. Uno nace, lo educan y enseñan, y hasta donde yo creía, lo que uno veía era real, incuestionable, uno podía distorsionar muchas cosas con la verbalización, pero lo que veía, era y punto.
Imagínense que sorpresa la mía, el día que vi al primer hombre a una sombra pegado. Al principio creí que era mi vista, me froté un poco los ojos y …… nada seguí viendo lo mismo, quedé estupefacta. De todas formas no quise darle más importancia, además, en un momento como aquel donde los problemas personales andaban devorándome, apenas retuve la imagen unos instantes y continúe mi paseo con la mente totalmente inmersa en mis tribulaciones.
A la mañana siguiente mientras iba hacia el trabajo, no vi uno no, vi muchos, eran todo hombres a una sombra pegados....pensé que había perdido la razón definitivamente, ¿qué me estaba ocurriendo ?¿ estrés ?¿ ansiedad ?¿ Un brote psicótico tal vez? siempre le tuve pánico a la locura, sabía que estaba arraigada en mis genes, toda la vida temiendo que me poseyera ¿era ese el momento ? No, no estoy preparada, pensé, eso no me puede estar sucediendo. Pero era absurdo, sucedía , claro que sucedía, para que negarlo, y no me refiero a volverme loca, me refiero a ellos, eran reales, allí estaban, tan tranquilos, deambulando por la calle sin darse cuenta de nada .
Alguien se acercó, me rozo el rostro con sus manos y dijo…siempre ha sido así, en su ignorancia son incapaces de percibir su propio lastre. Todo ser nace con su sombra, solo unos pocos privilegiados la pierden enseguida, justo unos días después de haber nacido, el resto, crecen, se reproducen y mueren pegados a ella. Cuantos más años viven, más larga es, más se aferra a sus tobillos y mas peso arrastran. Su vida es lenta y tediosa e incapaces de pensar que es lo que sucede, cargan con su penitencia hasta el día de su muerte.
Entonces, tuve conciencia de mi realidad y supe que nunca jamás sufriría locura alguna, yo no tenía sombra, nunca la había tenido, solo un rayo de luz.